La mayoría de la gente piensa que durante el invierno tenemos
paradas las embarcaciones de recreo, bien amarradas a puerto o invernando fuera
del agua y en parte es verdad. Pero los que somos verdaderos aficionados a la
pesca no renunciamos a salir al mar, a pesar de los rigores climatológicos.
Aunque el invierno nos trae frecuentes temporales, como los que solemos padecer en el mes de enero, también hay momentos en que las condiciones son
favorables y en cuanto mejora el tiempo lo suficiente hay que estar en el agua.
La campaña pesquera invernal suele ser muy buena si sabemos
aprovechar esos días de calma o mejor tiempo entre temporal y temporal. Es el
momento de practicar la pesca a fondo, una de mis modalidades preferidas. Pesca
muy adecuada para relajarte, tomar un poco de sol invernal si se puede, y estar
entretenido esperando picada tras picada.
LOS PECES; ESPECIES Y FAMILIAS
Nuestras capturas pueden ser peces bentónicos, estrechamente
ligados al fondo, nadando habitualmente cerca de éste, o pelágicos,
que nadan generalmente en aguas libres.
Cualquier pez, ya sea peor o mejor nadador, termina por bajar al fondo para
alimentarse.
Bentónicos son la mayoría de los representantes de la familia de los espáridos
(besugo, aligotes, dorada, sargo, chopa, pargo, dentón, breca), los más
buscados por los pescadores de fondo. Suponen las capturas más frecuentes en
cualquier tipo de hábitat. De entre éstos es la chopa, también llamada
pispiruto o pantximiki en Vizcaya y birlote
o muxarra en Guipúzcoa, la pieza más buscada, tanto por la cantidad de capturas
que se puede hacer en una jornada como por la pelea que ofrece a pesar de no
alcanzar más que los 2 kilos como mucho. Aunque las piezas más valoradas y de
mayor tamaño son la dorada (urraburu) o el pargo (txato o machote).
También se suelen pescar peces de otras familias: lubina, abadejo, faneca,
congrio, cabra, cabracho, durdo, lantesa, jurel, caballa, pez raya, salmonete,
perlón, pez ballesta y unos cuantos más.
Como veis, las pescatas pueden ser de pescado muy variado.
TÉCNICA:
En el invierno lo aconsejable es pescar a más profundidad que en otras
estaciones del año, ya que las capas superficiales del agua se enfrían por la
acción de los vientos y temporales, pero las más profundas se mantienen
estables.
Establecemos nuestro rango de operaciones entre los 30 y 90 metros de
profundidad, si el tiempo lo permite lo más habitual es que andemos en sondas entre los 60 y 90 metros y nos reservemos las calas más abrigadas y menos profundas cuando hace peor tiempo fuera. Así que debemos de tener preparado un buen sistema de fondeo
con al menos 200 metros de buen cabo.
Buscamos más los fondos rocosos, aunque en fondos blandos (arena, fango,
cascajo) o mixtos (con piedras y entorno arenoso) también se pueden realizar
buenas pescas. Varían según el tipo de fondo, las posibles capturas. Brecas y aligotes
son más propios de fondos blandos. Chopas, sargos y mojarras, de fondos
rocosos.
Usamos el típico aparejo de volantín, con un par de brazolas cortas de
monofilamento de 0,40 a 0,50 mm dependiendo de la profundidad, armadas de
anzuelos del 2/0 ó 3/0 y por encima del plomo, y otros aparejos con un solo
terminal más largo que pesque sobre el fondo.
Para cebo, usamos sobre todo sardina y chipirón. Habitualmente cebamos
primero con chipirón cortado en tiras y en la punta del anzuelo enganchamos un
trozo de sardina. Este cebo es infalible y no hay un solo pez que se le
resista. También usamos las gusanas, pero las reservamos para pescar sobre
fondos blandos.
Es importante tener a bordo pasta de sardina y anchoa para macizar y atraer
al pescado bajo la embarcación, utilizando diferentes artilugios para hacerlo
llegar al fondo.
Una buena práctica es tener preparada una caña con un terminal grueso, incluso
de acero, para pescar congrios y tiburones. Utilizamos como cebo peces pequeños
vivos de los que vamos sacando (cabras, chicharros o fanecas).
Al ser el invierno una época con pocas horas de sol y habitualmente bajas
temperaturas, aprovechamos las horas centrales del día para pescar. Así que no
hay que madrugar y en cuanto empieza a oscurecer levantamos el ancla y nos
dirigimos a puerto. Aun así, lo normal es entrar de noche, por lo que las
precauciones en la navegación se deben extremar.
Cuando se da bien el día, llegamos verdaderamente cansados, ya que la
actividad a bordo suele ser frenética; subir pescado y cebar continuamente,
soportando el frío y manteniendo el equilibrio, además de las tareas de
recuperación del fondeo a última hora… Todo esto hace que al día siguiente las
agujetas estén aseguradas. La
satisfacción está en haber pasado unas horas estupendas en plena naturaleza y
traer para casa varios kilos de pescado de categoría.
RECETA
CHOPA O MOJARRA A LA SAL:
Aunque esta forma de preparar el pescado
no es muy habitual en el País Vasco, para algunos peces resulta muy adecuada,
como la mojarra y la chopa, ya que evita la pérdida de jugos y mantiene intacto
su sabor. Con la chopa hay que tener cuidado para no pasarse de cocción. Hecho en
su punto es un pescado buenísimo, por lo que la modalidad a la sal le viene
como anillo al dedo. Pescado poco
conocido por el público en general, es muy valorado en los pueblos de la costa,
sobre todo en el invierno que es cuando más grasa tiene.
Dejar sin escamar (de esta forma se
protege mejor del exceso de sal).
30 minutos de horno a tope
(+-250º).
Las mejores piezas son los pescados
en torno a los 500-600 gr. Podemos asar varios a la vez.
Cubrir el pez con sal gorda de
hornear, dejando sin tapar cabeza y cola. El resto se recubre hasta hacer una
buena capa, la cual se humedece ligeramente. No poner sal en el fondo de la
bandeja. Golpear con una cuchara la costra de sal, comprobando que está dura y
no se desmorona.
Cuando amarilleen los bordes de la
sal es que el pescado está a punto. Para servir, dar un par de golpes a la
cubierta de sal hasta romperla. Ésta se separará sin problemas. Retirar la
piel, que debe salir entera. Se sirven las raciones de pescado sin espinas y
poniendo cuidado en evitar la sal sobrante.
Podemos acompañar el plato con un poco de mahonesa al ajo o una vinagreta
de aceite y limón o vinagre de Jerez.
Si queréis profundizar en el tema de la pesca desde embarcación fondeada podéis
consultar varios artículos al respecto en pescaygastronomia.blogspot.com /
pesca fondo